Beauty Blender, «la esponja milagrosa».
Os cuento mi historia con las esponjas. Desde que empecé mi formación como maquilladora, me enseñaron con esponja, pero a poco descubrí también la aplicación de base de maquillaje con brocha. Las mil y una brochas que existen para aplicar bases y mi frikismo incansable hicieron que dejara las esponjas a un lado. Mi escusa era que ninguna esponja tenía la forma adecuada para llegar a todas las zonas de la cara, además de absorber demasiado producto y para mi opinión que la dureza de la esponja fuera lo más suave y blandita posible, para que al maquillar la sensación fuera lo más agradable posible.
Sabía de la existencia de la famosa Beauty Blender, todo el mundo hablaba de ella como «la esponja milagrosa». Yo sinceramente, antes de comprarla, pensé una y mil veces que su precio, para ser una esponja con usos limitados, era elevado. Probé varias chinorris, es decir, copias de ebay. Hasta 6 llegué a comprarme de diferentes formas y colores, pero me parecían muy duras, y la textura de la esponja dejaba mucho que desear, no se parecía en nada a lo que puede ser la textura de una piel.
Tiempo después, Primor, perfumería malagueña y cada vez más nacional, la puso rebajadísima de precio, 12’55€. Dije, ¡Ésta es la mía! Bendito momento…¡¡Es perfecta!!
La he usado para poner la base directamente con la esponja. Perfecta.
Para primero aplicar la base con brocha y terminar puliendo con la esponja. Perfecta.
Para aplicar iluminador y colorete en crema. Perfecta.
¡Estoy enamorada! Reconozco que para aplicar bases demasiado densas como puede ser una «Full Cover» de Mac o un Pan Stick no sirve, pero éste tipo bases no suelo utilizarlas nunca.
Lo primero que hay que hacer es lavarla. Con agua templada y una pastilla de jabón (de la que sea, coco, argán, oliva o incluso lagarto de toda la vida) la empapáis bien de agua. Lo primero que vemos es que…¡¡¡Se infla!!! Aumenta el doble su tamaño y se convierte en una esponja totalmente «achuchable» (blandita en mi idioma)
Tengo varias, la rosa fue la primera y con los primeros lavados me destiñó un poco, pero sin problemas. Luego probé la negra, que es un poco más grande, y aparentemente más resistente (imagino por aquello de que es PRO) Ambas me encantan.
Ahora estoy probando la Real Techniques, Miracle Complexion Sponge, o lo que es lo mismo, la esponja de Samantha Chapman, hermana de las famosas Youtubers Pixiwoo. Me gusta bastante, me sorprendió que para su precio (5€ en iherb.com) es muy suave y blandita. En breves, os contaré más sobre ella que casi tengo una opinión hecha sobre la comparación.